Mi bebé tiene mal aliento: ¿a qué puede ser debido?
El mal aliento infantil puede ser un indicador de que algo no va bien. Suele estar relacionado con alguna enfermedad o problema dental.
Al sentirle mal olor en la boca del pequeño, se debe analizar inicialmente la posibilidad de que el pequeño haya introducido algún cuerpo extraño en las fosas nasales (trozos de goma-espuma, semillas, juguetes pequeños etc.)
Descartada esta posibilidad, el siguiente paso es verificar si el niño ha mantenido una higiene bucal adecuada. Es importante que los padres supervisen el pequeño mientras se cepilla los dientes para asegurarse de la buena calidad del cepillado.
Placa bacteriana y sarro
Si el niño cultiva una rutina correcta de higiene bucal y aun así presenta halitosis, se recomienda acudir al dentista para que evalúe el estado de salud de la lengua, las encías y los dientes. El profesional también verificará la acumulación de placa bacteriana y sarro, que son los mayores causantes del mal aliento.
Si el examen odontológico descarta alteraciones bucales, es hora de consultar el pediatra para que estudie otras posibles complicaciones. El experto hará el diagnóstico mediante algunas preguntas, examen físico y estudios de laboratorio y radiológicos.
Nunca te olvides de que la salud bucal refleja la salud general del cuerpo, así que cualquier alteración en la boca, tanto en adultos como en niños, debe ser llevada muy en serio.