Las encías sangrantes pueden ser una señal de peligro
En ocasiones, cuando mordemos una manzana vemos rastros rojos. Otras veces vemos sangre cuando escupimos después del cepillado. El sangrado de las encías es una molestia común, que suele afectar hasta 60% de la población mundial a lo largo de la vida.
La principal razón del sangrado es la acumulación de placa, que puede causar una enfermedad conocida como gingivitis, o inflamación de las encías, que no suele ser peligrosa si es tratada.
Pero el sangrado también puede ser una señal de algo más grave. De acuerdo con la Dra Laura María Diaz Guzmán , miembro de la Asociación Dental Mexicana, esta molestia aparece en casos de leucemia, linfoma o cáncer bucal.
Las encías saludables no sangran. Son de color rosa pálido, están firmes y tienen un perfil corrugado, mientras que las encías enfermas e inflamadas son color rojo oscuro y están suaves y sensibles.
Con frecuencia, un sangrado ocasional alrededor de algunos dientes indica que es necesario limpiarlos mejor. Sin embargo, si el sangrado permanece, la experta recomienda acudir a un odontólogo quien hará el diagnóstico definitivo.