El estrés infantil deja huella en la sonrisa; sepa cómo prevenirlo
La higiene bucodental es algo vital para mantener la salud del cuerpo y de la dentadura de los niños y adultos. Pero, al igual que en los adultos, en los pequeños hay otros factores que pueden afectar a la salud de sus dientes. Uno de los que puede perjudicarles en mayor medida es el estrés, una patología asociada habitualmente a los mayores pero que cada vez afecta más a los niños y a los adolescentes.
Muchos niños sufren estrés debido a la presión social y académica, a las clases extraescolares, a la preocupación por ser mejores en clase. Todo esto muchas veces les deja “secuelas” en la salud bucodental.
El estrés infantil puede derivar en problemas como la inflamación de las encías, la aparición de caries, los herpes labiales o las aftas. Ayuda al pequeño a prevenirlos.
Uno de los trastornos más habituales producidos por la ansiedad es el sangrado e inflamación de las encías, que puede derivar en gingivitis, por lo que posiblemente les duelan las encías al cepillarse los dientes.
Para intentar prevenir estas molestias, expertos recomiendan redoblar los cuidados con la boca de los pequeños. Observar si se ha producido en el niño un cambio en la coloración de la encía (más roja), si hay inflamación o pérdida de encía alrededor de algún diente, si le sangra la misma, si presenta alguna herida o afta y si tiene mal aliento son algunas de las recomendaciones.
En caso de que presente cualquiera de estos síntomas, no dudes en visitar al especialista para poder prevenir cualquier tipo de problema bucodental.
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