Dolor, hinchazón o ardor. Los problemas bucales a menudo suelen ser muy molestos. Para evitar que se agraven, resulta fundamental saber cómo reaccionar en las emergencias orales.
Diente roto por un choque: cuando se rompe sólo una parte del diente, la recomendación es sumergir el fragmento en una solución salina, en leche, o (en el último caso) en agua filtrada y buscar un dentista.
Diente roto por un choque: si se rompe el diente por completo (con raíz), se debe buscar inmediatamente un dentista
Lengua o labio mordido: en estos casos, es recomendable poner una gasa o algodón en la zona magullada durante 10 minutos
Boca quemada: no hay mucho que hacer cuando se quema la boca. Es necesario esperar para la regeneración del tejido, que suele tomar una semana.
Irritación y rajaduras: la exposición prolongada al sol y al frío puede causar estas grietas y erupciones cutáneas. Para evitarlas, el paciente debe mantener hidratada la región
Afta: las aftas necesitan una atención especial. Ulceraciones aftosas no tienen una causa definida, pero ciertos factores pueden desencadenar su aparición como alimentos ácidos y el estrés. Si este es el caso, identifica el alimento que te está causando el problema y evítalo.
Herpes frecuente: al tener herpes, es esencial evitar la manipulación de la región (como rascarse, por ejemplo). Hay cremas y ungüentos especialmente para este tipo de problema.